Valorar la vida, la amistad, el amor y la familia por encima de todo!

Un día nos dijo Pablo Laguia que su hermana se quería casar, y dijimos ¡esta no me la pierdo!, y por supuesto nos encargamos de organizar su boda, fuimos los wedding planners de María y Mirco, una pareja que ha vivido en muchos países, que se han recorrido la mitad de Europa, y han aprendido los correspondientes idiomas. Al final decidieron celebrar su boda en España, porque ella es española, pero no os creáis, también tuvieron su boda en Italia.

«Lo primero de todo, tenemos que confesaros que os engañamos Paloma y Eugenio, la boda que nos organizasteis, en realidad no fue nuestra primera boda … empezaré por como nos conocimos, algo muy típico, en nuestro puesto de trabajo rodeados de miles de cajas de vino Español. Según Mirco llevabamos casi un año trabajando juntos y él se fijo en mí desde el primer día, yo sin embargo no me habia fijado en él, su cresta, sus brazos llenos de tatuajes, «italiano» (ya sabeis lo que dicen de ellos) y con cara de «malote», hizo que lo juzgara como un «chulito» y aunque me parecía guapísimo no le hacía ningún caso, pero la primera vez que mantuve una conversación con él y lo mire a los ojos, me di cuenta de lo equivocada que estaba, por que es la persona más humilde y bonita que he conocido.

Llego el día en que decidió invitarme a cenar e insitió en ir a recogerme a casa con una rosa, comenzaba su conquista … yo pensé que me llevaria a cenar pizza, algo típico italiano, ¡pero no!, me llevó a un restaurante de alta cocina con sommelier y maridaje de vinos, y el cocinero (que más tarde me enteré que era amigo suyo y lo tenían todo planeado) salía a explicarnos cada plato, cocochas, trufas, etc. Está claro que me conquistó y desde aquel momento me di cuenta que sería el amor de mi vida. Asi que a los 5 meses me pidio matrimonio al estilo Berlinés:

¿Quieres casarte conmigo haciendonos un tatuaje? Yo por aquel entonces no llevaba ninguno, pero no lo dudé y le dije que SÍ, nos tatuamos el signo infinito en el anular izquierdo, que es nuestro anillo de bodas, nuestro cura fue un tatuador Londinese que antes de comenzar dijo: Do you want to marry ..? y tuvimos testigos y todo jajjaja! después lo celebramos con amigos haciendo una barbacoa en el parque de Tempelhof.

Pasaron un par de años y decidimos mudarnos de Berlin, para poder estar mas cerquita de la familia, e ir a una ciudad nueva, donde poder crear un hogar juntos, el mar, la playa y un buen aeropuerto para poder escapar de vez en cuando. Todo esto nos hizo que nos decidieramos por Alicante, así que comenzamos desde cero sin trabajo y sin casa, una nueva aventura, pero antes de aterrizar en Alicante, decidimos ir a Italia, asi que hicimos Berlin-Italia y nos quedamos unos meses, fué alli donde Mirco previa pedida de mano oficial a mi padre (todo un caballero), me pidió la mano con un anillo (esta vez de verdad) en la plaza de España en Roma, mientras atardecia me pidió matrimonio, y me prometió que cogería mi mano y caminaríamos en cualquier lugar del mundo pero siempre juntos … y hasta ahora …»

Siempre decimos que cada pareja es un mundo y la verdad que escuchar la historia de cada una de ellas es fascinante, la de millones de parejas que hay en el mundo y todas las historias que no se han contado …

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