Puede ser que el desierto no guste a mucha gente, la vastedad, la soledad y la incertidumbre no dejan indiferentes a nadie, pero si lo piensas tiene su encanto. Esta es la razón por la que nos fuimos a hacer un shoot a este paraje inhóspito.

Cada vez más está esta tendencia de las parejas a casarse en solitario, no es realmente fugarse para casarse como ocurría antaño (lo típico de irse a casarse a Las Vegas), sino irse como dos enamorados, como dos adultos a sellar su amor. Coger un vuelo, en coche o como sea, pero suele ser lejos del lugar de residencia, contratan un fotógrafo que documente su día y le lanzan a la aventura!

Quisimos hacer un elopement (palabra inglesa que significa ese concepto que acabamos de explicar) en un entorno diferente, y nos fuimos al desierto. Un vestido de novia de infarto, un ramo de novia y un altar y un anillo de fuego que hipnotiza.

Si queréis ver el post que publicaron en Rock n Roll Bride (la revista de bodas más importante del Reino Unido y una de las más importantes del mundo) haz click aqui, en cualquier caso, os dejamos todas las fotos y antes una obra maestra en vídeo (ver por este orden). Y este fue el equipo que nos reunimos para pasar el día juntos y hacer lo que estáis a punto de ver:

Fotógrafo – Pablo Laguia
Florista – El jardín del cabo
Videógrafo – David Rodriguez
Ford Mustang – Talleres Virauto – Algorfa
Maquillaje – Maria Catalá – Makeupzone
Peluquería – Sagoa
Modelo femenino – Nazaret Gea
Modelo masculino – Leiam Jack
Vestido de novia – Otaduy
Zapatos – Mustang
Expert o en fuego – Pyros espectáculos
Organización y diseño – Paloma Cruz Eventos